No vuelvas a cocinar así el gazpacho, prueba mejor estas recetas

El gazpacho tradicional tiene otras variantes igual de sencillas y riquísimas, que no te puedes perder. Te enseñamos algunas de ellas. 

El gazpacho tradicional andaluz es el anfitrión perfecto de todos los hogares españoles. Ya sea en versión precocinada o en versión casera, la popularidad de este sencillo plato es tan grande que nunca puede faltar en nuestra nevera durante el verano.

Esta receta de sopa fría es tan fácil que no es de extrañar que la elijamos a la hora de preparar un plato rápido y refrescante. Pero, ¿qué pasaría si en lugar de hacer la receta tradicional hiciésemos otras variantes más originales e innovadoras? 

Cuatro formas de versionar el gazpacho tradicional

Todos conocemos los ingredientes básicos del gazpacho tradicional: tomate, pimiento verde, pepino, ajo, aceite de oliva, vinagre y sal. Pero lo cierto, es que existen otras formas más creativas de cocinar este plato. Que nos perdonen los andaluces porque hoy te traemos cuatro formas sacrílegas de versionar esta sopa fría.   

Gazpacho de remolacha 

Así es, has leído bien, gazpacho con remolacha. Ese alimento de color rojizo y peculiar sabor, que mezclado con los ingredientes básicos del gazpacho te dará como resultado una sopa fría de lo más colorida y original. Perfecta para presentar en vasitos individuales durante las comidas familiares de verano. 

Lava y cepilla las remolachas y ponlas a cocer en una olla durante unos 25 minutos. Más tarde ponlas a enfriar en hielo y quítales la piel. Después añádelas a la batidora con cebolleta, mayonesa, yogur, pimienta y agua. Tritura bien y échale un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Te aseguro que te sorprenderá su sabor.  

Gazpacho de melón 

En esta variante mezclamos frutas, verduras y hortalizas de lo más refrescantes. Para ello corta el melón a trozos grandes, junto a medio pimiento, ajo al gusto, pan (ponlo previamente a remojo) y medio pepino pelado. Añade el pan con agua y bate bien.  Por último, echa aceite, sal y vinagre al gusto y vuelve a batir. Súmale a su combinación de sabores, unos trocitos de jamón serrano. Quedará delicioso. 

Gazpacho de sandía 

Cuando creíamos que el gazpacho no podía refrescar más, aparece el gazpacho de sandía. Los dos clásicos de las comidas de verano. En esta versión fusionamos la sandía asada en la sartén y el resto de ingredientes tradicionales, junto a un apio y una manzana para darle un toque más especial. No te defraudará. 

Gazpacho de cerezas 

En esta receta utilizaremos la técnica de la maceración. Coloca todos los ingredientes, excepto las cerezas en un cuenco y déjalos macerar durante tres horas. Pon el tomate pelado y cortado, medio pimiento verde, un trocito de cebolla, la mitad de un ajo, aceite, vinagre de jerez y sal. 

Pasado el tiempo recomendado introduce todos los ingredientes en la batidora junto a unos 400 gr. de cerezas sin hueso. Bate bien hasta conseguir la textura deseada. Para completar esta fantasía de plato, desmenuza un poco de queso feta o queso de cabra, y añade unos trozos de cerezas. Y… ¡Exquisito!  

Estas cuatro formas de versionar el gazpacho tradicional andaluz son una maravilla. Tú y tus invitados quedaréis sorprendidísimos con su sabor, su color y su textura. Arriésgate a probarlas, te encantarán.