Cuando se trata de que los niños regresen a la escuela, los padres piensan en bolsos, materiales y el costo de los uniformes.
En la vuelta al cole hay una serie de riesgos potenciales para la salud que se deben considerar cuando comienza el nuevo período. Hay una tendencia entre las adolescentes y pequeños a llevar bolsos o bolsas como mochilas escolares, pero la realidad es que no son los más ergonómicos.
Se ha descubierto que las bolsas de gran tamaño, como los bolsos de mano, causan dolor de cuello y espalda, lo que no sorprende si se piensa en lo pesada que puede ser una mochila escolar cuando se llevan todos los materiales.
Asegúrese de que su hijo esté de acuerdo con cualquier bolso que compre, pero busque un estilo de mochila que acepte usar en ambos hombros para reducir el riesgo de dolor de espalda.
Consejos para que tus hijos regresen bien a la escuela
También el nuevo período escolar a menudo puede parecer un nuevo comienzo y una gran oportunidad para involucrar a sus hijos en la elección de alimentos a la hora del almuerzo. Es una buena oportunidad para al menos meter una porción de fruta y de verduras para obtener fibra e hidratación.
Una dieta sana y variada también puede reforzar la inmunidad, que es esencial para ayudar a los niños a evitar los resfriados. Los niños nunca son demasiado pequeños para aprender sobre su mente, sus emociones y lo que constituye una buena salud mental.
El comienzo de un nuevo curso puede ser un desencadenante de nuevos problemas de salud mental o, a menudo, puede sacar a relucir problemas del pasado.
Los síntomas pueden variar ampliamente y ser físicos, emocionales o aparecer como cambios de comportamiento.
Todos recordamos cómo pueden ser los baños escolares, por eso nunca es demasiado pronto para aprender buenos hábitos de higiene.
Enséñele a su hijo cómo lavarse las manos correctamente: use agua (tibia si es posible) y jabón, y asegúrese de meterse entre los dedos, debajo de las uñas y el dorso de las manos antes de secarlas bien.
La rutina es buena para nosotros, según numerosos estudios.
Tener un horario establecido puede reducir el estrés, mejorar la salud mental, reducir la ansiedad y darnos más tiempo libre.
Charle con su hijo e involúcrelo en la planificación de su propia rutina de regreso a clases, incluida la hora de acostarse, cuándo guardan sus dispositivos, cuándo hacen sus tareas, cómo tienen en cuenta el ejercicio, qué desayuno tomarán y a qué hora.
