El pan de centeno tiene varias ventajas como alimento, pero si lo consumimos todos los días, nuestro organismo puede dar algunas señales negativas.
Si hay un alimento que no falta en la mayoría de los hogares españoles, ese es el pan. Puede ser blanco, de molde, integral, etcétera. Está presente en el desayuno, en la hora de la comida, en la merienda, en algún bocata sin horario y en la cena.
En esta oportunidad, nos detenemos a hablar del pan de centeno, siempre tan cuestionado o alabado. ¿Se puede comer todos los días? ¿Es positivo? ¿Influye negativamente en nuestro organismo?
La respuesta no es tan simple, sino que tiene sus matices para conocer y analizar. En este caso, como en tantos otros, su consumo diario tiene ventajas y desventajas. Lo importante es conocerlas para que cada uno haga su propia conclusión y elija el camino más acertado para su vida.
Los efectos del consumo diario del pan de centeno
Empezaremos por remarcar los puntos positivos que tiene el pan de centeno si lo comemos a diario. A tomar nota…
Lo primero para destacar es que el centeno es muy rico en fibra, esto ayuda para evitar el estreñimiento y mejora la digestión. Además, su índice glucémico, que por supuesto es más bajo que el pan blanco, ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre.
¿Hay más puntos a favor? Sí, porque el pan de centeno tiene también más nutrientes que el pan blanco e incluye minerales como el magnesio y algunas vitaminas del grupo B. Por otra parte, según distintos estudios, los granos integrales son buenos para tener un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Ahora pasemos a las desventajas, ya que no es todo lindo en el consumo diario del pan de centeno. Primero, como pasa con otros tipos de pan, el de centeno contribuye al aumento de peso si se come en exceso, ya que presenta muchas calorías.
También, claro está, se debe saber que este alimento contiene gluten, un detalle no menor para aquellas personas con enfermedades celíacas o con sensibilidad al gluten. Y en el pan de centeno, a su vez, pueden estar presentes ciertos carbohidratos fermentables, que, en algunos cuerpos, suelen producir un poco de hinchazón y malestar.
Por último, es necesario saber que los altos niveles de fibra en el centeno quizá pueden interferir en la absorción de algunos medicamentos.