¿Eres de los que se ducha todos los días? Pues cuidado. La Universidad de Harvard afirma que es malo para la salud.
Mantener el cuerpo limpio es sinónimo de salud. Una buena higiene personal puede hacer que seas menos propenso a las enfermedades, y previene posibles infecciones. De hecho, el término higiene proviene del griego hygieinê que significa “sano”; y éste, a su vez, se deriva de Hygíea, el nombre que los antiguos griegos le daban a la diosa de la salud.
Es decir, estar limpitos es también estar sanos. Así pues, sería fácil pensar que cuanto más nos duchemos, más protegidos en salud estaremos. ¡Pero cuidado! Científicos de la Universidad de Harvard advierten de que lavarse en exceso podría ser contraproducente. Concretamente, en su estudio, aseguran que ducharse todos los días podría ser perjudicial para la salud.
¿Por qué es malo ducharse diariamente?
Al parecer, en nuestra dermis existen ciertas bacterias que eliminamos cada vez que nos bañamos y que, al ser retiradas, pueden provocar que la piel se seque, llegando incluso a causar la aparición de irritación, picores e infecciones. Pero esto no lo es todo.
La prestigiosa universidad estadounidense también advierte en su informe, liderado por Robert H. Shmerling, doctor en Harvard y editor de Harvard Health Publishing, sobre la utilización de ciertos geles de ducha antibacterianos. Y es que, éstos pueden matar algunas bacterias que contribuyen al «equilibrio de microorganismos» en la piel y también pueden fomentar la aparición de «organismos más fuertes y resistentes a los antibióticos».
Por otro lado, en la tesis no se precisa cuál es la frecuencia de ducha aconsejable, ya que depende de factores individuales y del estilo de vida de cada persona. Lo que sí concretan es que es recomendable llevar a cabo duchas de corta duración, de unos tres minutos, y con agua tibia en vez de muy caliente. Además, el estudio recalca que tampoco hay que descuidar la higiene corporal. La Universidad de Harvard enumera los efectos negativos de no lavarse, entre los que destacan la acumulación de suciedad, grasa, sequedad y picazón en el cuerpo.
Finalmente, en cuanto a los productos de baño, es importante que éstos no lleven parafinas, ni otros derivados del petróleo; así como demasiado aromas o perfumes. Solo consiguen esparcir los químicos por la capa córnea de la piel y comenzar a erosionarla, provocando irritación. Lo mejor es usar productos de glicerina que contienen propiedades humectantes que hidratan la piel, calman los picores, crean una barrera natural de protección, exfolian y son de pH neutro.