Las razones por las que el sexo puede influir en tu rendimiento deportivo no son derivadas por la actividad sexual
Durante décadas, algunos deportistas se han abstenido de practicar sexo los días previos a una competición o entrenamiento importantes, por miedo a que las relaciones sexuales pudieran mermar su rendimiento. ¿Tienen fundamento científico esas «privaciones»?
Según el sociólogo y sexólogo Richard Ling, miembro de la Asociación Mundial para la Salud Sexual, ninguno de los numerosos estudios realizados sobre el tema ha podido sustentar que una actividad afecta negativamente a la otra, por el contrario, han resaltado las similitudes asombrosas que existen entre ambos ejercicios (sexual y deportivo) y cómo se complementan entre sí.
Siempre que no implique falta de descansos o hábitos de vida poco saludables para un deportista, el sexo no sólo no perjudica el rendimiento deportivo, sino que también ayuda a reducir el estrés y la ansiedad en los días previos a una competición importante.
Sexo y rendimiento son compatibles
Los mitos son diversos. El famoso boxeador Muhammad Ali mantenía una abstinencia sexual de seis semanas antes de un combate. En la película Rocky, el entrenador creía que sus piernas se debilitaban después de mantener relaciones sexuales. Pero muchos otros deportistas de élite, en cambio, afirman que nunca habían tenido problemas para mantener relaciones sexuales antes de las competiciones. Como dijo el legendario entrenador de los New York Yankees, Casey Stengel: «No es el sexo lo que destroza a estos tipos, es quedarse despierto toda la noche buscándolo”.
Los resultados de las pruebas fisiológicas no se ven afectados por la actividad sexual la noche anterior a una competición, según varios estudios sobre el tema. Un deportista profesional debe evitar pasar demasiado tiempo en cama la noche previa a una competición, no tanto por el gasto energético sino por la pérdida de algunas horas de sueño. Por supuesto, mucho depende de la duración y la intensidad de las relaciones sexuales.
Es poco probable que tener relaciones sexuales la noche anterior a una actividad competitiva afecte el rendimiento, dado que la actividad sexual típica entre parejas casadas sólo utiliza de 25 a 50 calorías (la energía equivalente a subir dos tramos de escaleras) y que algunas sólo alcanzan picos de 100 calorías. «Estos estudios hacen una serie de valoraciones puramente físicas que en realidad tienen poco impacto en el rendimiento deportivo», subraya Giorgio Galanti, ex profesor de medicina deportiva en la Universidad de Florencia que realizó una revisión de las investigaciones sobre el tema en 2016.
Desmontado el mito, una cosa podemos tener clara: realizar actividades deportivas nos convierte en mejores amantes. Los deportistas también tienden a comer de forma más sana, proporcionada, equilibrada y variada y a dormir lo suficiente, lo cual resulta muy beneficioso para el sexo. Además de llevar un estilo de vida saludable, existen ejercicios específicos que pueden mejorar nuestro rendimiento sexual.