El pollo es una de las bases de nuestra dieta, aunque muchas veces no sabemos cómo acompañarlo. Aquí tienes tres recetas fáciles que siempre salen bien
Cuando no sabemos de qué forma acertar las recetas clásicas son una manera infalible de acertar. Aún más si le añadimos uno de los ingredientes más versátiles de nuestra cocina, el pollo, un elemento rico y que puede ser muy saludable si lo acompañamos de forma acertada.
Para ayudarte a acompañar el pollo de las mejores formas hemos elegido dos recetas clásicas que te podrán servir en cualquier época del año, y que, por supuesto, llevan el pollo como ingrediente principal.
Son dos preparaciones tradicionales en nuestro país: el guiso al ajilllo y la famosa pepitoria. Una de las cosas que tendrás que tener en cuenta los tiempos cuando cocines el pollo, ya que es un ingrediente muy delicado que lo mismo puede quedar crudo como demasiado hecho y seco.
Las diferentes formas de acompañar el pollo
El limón y el ajo se llevan sorprendemente bien que quizás no te esperabas, tendrás que pelar tres dientes de ajo; machaca dos y lamina el restante. Tendrás que salpimentar el pollo troceado y pásalo por harina. Primero doraremos los ajos machacados. Los retiraremos y meteremos el pollo que freímos durante 8 minutos. Transcurrido el tiempo, retira ¾ partes del aceite y agrega un vaso de caldo de ave, el zumo de un limón y el ajo laminado. Cocina todo a fuego lento 12 minutos más. Espolvorea el pollo con perejil fresco picado y acompáñalo con una ensalada de tomate en gajos, zanahoria laminada y vinagreta.
Una segunda opción será el pollo de corral en pepitoria con champiñones. Empieza salpimentando y dorando el pollo en la cazuela con aceite. Luego, lo reservamos y en el mismo aceite doraremos los años y almendras laminadas. Prepara un majado, freiremos dos rebanadas de pan en dados y unas pocas almendras crudas que machacaremos en un mortero con unas hebras de azafrán. E integraremos todo con caldo de ave.
Por otra parte, en la cazuela del pollo rehoga una cebolla picada fina y vierte un vaso grande de vino blanco. Reduce el líquido e incorpora el pollo, el majado, sal y pimienta. Cocina 15 minutos. Lava 300 g de champiñones y ponlos en la cazuela, enteros. Guisa todo otros 15 minutos y añade los ajos y las almendras laminadas. Remueve para integrar, espolvorea perejil fresco y tomillo y sirve.
