Britney Spears no ha tenido ni mucho menos una vida sencilla: la dieta a la que estaba obligada le hizo mucho daño a nivel mental
El mundo de la fama no es ni mucho menos siempre lujoso ni está repleto de buenas noticias. Hay algunos casos que provocan verdadero rechazo en la sociedad, como los que se han descubierto hace pocos días. Uno de ellos es del de Britney Spears, que ha confesado lo que ha tenido que sufrir en su vida personal. De sobra es conocido el excesivo control que ejercía su padre sobre ella, pero ahora se conocen más detalles.
A tal extremo llegó el padre de la estrella del Pop, que controlaba incluso lo que comía. Más allá de mostrar una clara actitud machista con Britney, el padre quería que su hija no engordase lo más mínimo en ningún momento. Este control provocó ansiedad y muchos problemas de otro tipo a la cantante, que se ha abierto en canal para desvelar ese tipo de prácticas durante un gran periodo de su vida. Desde hace algunos años, Spears ya no está siendo controlada por su padre ni por nadie. Ahora es libre y por ello se ha atrevido a contar cómo ha sido su vida.
La dieta ‘obligada’ de Britney Spears que está conmocionando al mundo
Han pasado algunos años, pero Britney Spears ha creído que era conveniente contar a todos los ciudadanos del planeta lo triste y difícil que han sido varios periodos de su vida. Su padre. Jamie Spears, quería controlar hasta el más mínimo milímetro de su vida. Obligaba a su hija a seguir una dieta más que excesiva que ahora está siendo noticia en todo tipo de medios de comunicación.
A través de su biografía, Britney ha dejado claro al mundo cómo era su día a día. Su dieta era tan extrema que su alimentación se basaba en «casi nada más que pollo y verduras enlatadas». Muchas veces pedía ayuda, pero no era correspondida: «Me puso a una dieta estricta. La ironía era que teníamos un mayordomo y yo le rogaba que me diera comida de verdad. ‘Señor’, le suplicaba, ‘¿podría por favor servirme una hamburguesa o un helado?’. ‘Señora, lo siento’, decía, ‘tengo órdenes estrictas de su padre'». Su vida fue un infierno durante mucho tiempo: «Dos años es mucho tiempo para no poder comer lo que quieres, especialmente cuando es tu cuerpo, tu trabajo y tu alma los que generan el dinero del que todos viven».
«Dos años de pedir patatas fritas y que me dijeran que no. Lo encontré muy degradante«, comentó Britney Spears en su autobiografía.