Seguro que más de una vez has incurrido en este error a la hora de introducir vasos o platos en el lavavajillas.
El lavavajillas se ha convertido en un electrodoméstico esencial en muchos hogares, por el ahorro que ofrece en tiempo y agua. Es un aparato realmente cómodo, pero que debe usarse de manera correcta, evitando uno de los errores más comunes a la hora de introducir los platos, vasos, etc.
Seguro que, alguna vez o repetidamente, has introducido algún plato o vaso al lavavajillas después de haberlo enjuagado previamente en la pila. Y aunque creas que puede ayudar a la posterior limpieza, reduciendo así la tarea del electrodoméstico, es un hábito que hay que eliminar por dos motivos: se gasta más agua de la necesaria y el lavavajillas puede no funcionar de forma correcta.
¿Por qué no debemos enjuagar los platos antes de meterlos al lavavajillas?
Gracias a las nuevas tecnologías podemos evitar este gasto extra en agua que resulta totalmente innecesario y que, aunque no lleve mucho tiempo realizar dicha acción, también te mantiene ocupado. Los lavavajillas actuales tienen sensores que son capaces de comprobar la cantidad de suciedad que tienen los platos, vasos y demás utensilios. Por lo que, si limpias antes la vajilla, aunque sea simplemente con agua, detectará que no están casi sucios y la limpieza será peor.
Aunque sí que es recomendable eliminar los restos grandes, tal y como señalan los propios fabricantes de lavavajillas y de los detergentes especiales para ellos, no es necesario introducir los platos debajo del fregadero. Basta con limpiar esos restos con un papel. Así evitarás que los filtros del electrodoméstico puedan obstruirse y, posteriormente, estropearse.
Una vez subrayado el gran error, cabe destacar también que los lavavajillas deben tener un buen mantenimiento para que duren mucho más tiempo. Hay que mantener el filtro en buenas condiciones, por lo que se recomienda limpiarlo con frecuencia, para que funcione correctamente. Se debe limpiar también el lavavajillas por dentro, y como mínimo una vez al mes. Por otro lado, el brazo de aspersión tiene que estar libre de restos de comida y cal, por lo que se debe revisar a menudo para que no se taponen los agujeros por donde sale el agua.
Asimismo, si quieres evitar que tu lavavajillas tenga cal, te recomendamos que realices un ciclo de lavado, con el propio electrodoméstico vacío y con dos cucharadas de ácido cítrico, un potente desinfectante. Con estos sencillos pasos, tu lavavajillas funcionará mejor durante mucho más tiempo y tu vajilla saldrá mucho más limpia y brillante.
