Si te encantan los postres o quieres agasajar a tus invitados, te contamos cómo preparar un bizcocho de Nutella en diez minutos.
Con el ritmo de vida actual, que parece que estamos siempre corriendo de un lado hacia otro, cada vez tenemos menos tiempo para cocinar. Ni hablar si pasamos varias horas distraídos con el móvil, un vicio que nos reduce mucho más ese bendito tiempo que utilizamos para preparar una rica comida. Ahora bien: pese a las dificultades, a veces, no queda otra opción que adaptarse a esta nueva realidad. Y una manera de lograrlo es generando nuevas ideas para poner en práctica: si el reloj se achica, que se agrande la inventiva.
En este artículo hemos decidido ayudar a aquellas personas que les faltan horas en su día a día. Si eres fanático de los postres o simplemente quieres preparar uno para agasajar a tus invitados, te contamos aquí cómo hacer un delicioso bizcocho de Nutella en apenas diez minutos. Sí, sólo necesitarás 600 segundos para llevar a cabo esta tarea que te dejará bien parado. No hay excusa posible porque, además, tampoco te representará un gran gasto económico: usarás apenas dos ingredientes y un tercero opcional.
La receta de un veloz bizcocho de Nutella para ser felices
Como ya avisamos, sólo necesitas dos ingredientes para ponerte a trabajar en la preparación de un rico bizcocho de Nutella: tres huevos y un tarro de Nutella. Nada más. Puedes sumar azúcar glas a esta lista de elementos necesarios, aunque es opcional, a gusto del consumidor.
Si ya tienes todo, pues manos a la obra. Debes seguir cinco pasos sencillos para tener una gran eficacia en esta preparación. Primero: apartar el tarro de Nutella a un sitio donde haya temperatura ambiente, con el objetivo de que se derrita un poco para batir con mayor facilidad. Ir controlado a ojo porque tampoco es necesario que se derrita por completo.
Segundo paso: batir los huevos en un recipiente, añadiendo lentamente la crema de cacao. Tercer paso: debes lograr crea una masa homogénea después de tanto batir, una masa que quede lista para meterla en el horno. Cuarto paso: se hornea durante cinco minutos a una temperatura de 180 grados. Y quinto y último paso: el más fácil porque sólo hay que esperar que se enfríe y, si así se lo desea, se puede espolvorear mientras tanto con el azúcar glas.
Una receta fácil, económica, rica y que te ayudará a ahorrar bien.