Te enseñamos unos sencillos pasos para conservar el pescado en tu casa de manera segura, sencilla y sin que pierda sabor.
Consumir pescado no siempre es fácil. Sobre todo cuando hay que comprarlo con varios días de antelación y hemos de tenerlo en casa. Por eso mismo aquí te dejamos unos consejos para que ese proceso te resulte más sencillo, menos tedioso y estés seguro de que el producto permanecerá en las mejores condiciones.
A pesar de que somos conscientes de que los pescados y mariscos son una buena fuente de proteínas, vitaminas y minerales y que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, (AESAN) recomienda consumir entre tres y cuatro raciones de pescado a la semana, lo cierto es que cada vez no cuesta más acudir a las pescaderías y consumir este beneficioso producto. Principalmente, por las dificultades que encontramos a la hora de conservarlo en nuestras casas. Algo que te ayudaremos a hacer en este artículo.
Para mantener el pescado en condiciones óptimas una vez que lo tengamos en nuestro poder debemos de partir de conocer el origen del producto: si es salvaje o se trata de un ejemplar criado en acuicultura. Si se trata de uno de los primeros deberemos congelarlos durante 72 horas a -20ºC para asegurarnos de haber eliminado el anisakis. Por ello habrá que consultar al vendedor si ya ha sido previamente congelado o podemos hacerlo de nuevo en casa. Por el contrario, para los proceden de criadero no debemos congelarlos, pero tenemos que tener en cuenta otros aspectos para su correcta conservación.
Consejos para conservar el pescado en casa
Según cuenta el chef Carlos del Portillo, el inicio de la putrefacción está en la sangre y en el agua, por lo que debemos de intentar mantener al pescado lo más ‘seco’ posible, para ello lo secaremos antes de meterlo en la nevera. De igual forma, al introducirlo en el frigorífico trataremos de de envolverlo en un papel que deberá ser cambiado para que esté lo más seco posible durante los dos o tres días que vamos a tener el pescado en el ‘frigo’.