Los horarios de oficina pueden desestabilizar nuestro tiempo para comer. Te traemos algunos de los tentempiés más saludables
Este año 2024 muchos se han fijado el objetivo de obtener una mejor forma física, lo que posiblemente implique quemar la grasa de la barriga y tonificar sus músculos para ofrecer una imagen que ellos consideran deseable ante el espejo. Para poder lograr este propósito se hace necesario un cambio en los hábitos de alimentación. Tal vez debamos dejar a un lado la bollería industrial que consumimos durante el desayuno y no acudir con un hambre voraz a la hora de la comida.
La mejor solución a esta situación es el tentempié, el aperitivo para comer entre horas que aplacará un poco ese apetito que despierta tu estómago y que hace que tus tripas rujan como felinos enjaulados. Por supuesto, quedan del todo prohibidas las tostadas con mantequilla y mermelada, los croissants o cualquier otro derivado de la bollería industrial que contenga grasas saturadas o grasas trans.
En su lugar, podemos optar por algunos alimentos ricos en fibra que generen una sensación de saciedad necesaria para que no nos sintamos hambrientos al poco tiempo de haberlos comido. Además la fibra tienen otros muchos beneficios para la salud como pueden ser la mejora del tránsito intestinal al cuidar de la flora bacteriana que anida en las paredes del estómago y que previene afecciones digestivas y la prevención del estreñimiento.
Es importante que estos tentempiés también sean fáciles de preparar y que no ocupen demasiado espacio para que puedan ser transportadas con facilidad. Por último, el tentempié escogido debe tener un aporte calórico proporcional al desayuno que hayamos ingerido y a la comida que vamos a tomar, de modo que si desayunamos poca cantidad, el tentempié podrá ser un poco más abundante que si preferimos un desayuno copioso.
Algunos de los tentempiés que se ajustan a estas características pueden ser las piezas de fruta como una buena manzana no demasiado ácida, un plátano o cualquier otra fruta de temporada. También son una buena opción las frutas desecadas como las pasas o las ciruelas.
Finalmente, también podemos tomar frutos secos de origen no industrial que no estén conservados en bolsas de plástico o lácteos naturales como un yogur desnatado o un batido de leche natural sin conservantes o colorantes. Eso sí, por muy tentador que resulte, demos evitar los bocadillos si queremos acudir con hambre a la hora de comer.
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