La caza es un plato que puede sorprender a nuestros comensales si se prepara de forma adecuada. Te damos algunos consejos para que quede perfecta
La caza no es una de las carnes más comunes de la cocina mediterránea. De hecho, la mayoría de restaurantes especializados en la cocina de carnes como los asadores, en muchas ocasiones ni siquiera la incluyen dentro de los menús que después ofrecen a los comensales. Esto se debe a que su adquisición suele ser mucho más costosa que la de otras carnes y que no está disponible durante todo el año. No obstante, si cuentan con algunas piezas en casa, en dieta.com te enseñamos cómo prepararlos.
Los consejos sobre su elaboración corren a cargo de varios chefs expertos que se han puesto de acuerdo. Uno de los animales cazados que se consume con más frecuencia es el venado y, en su caso, no todas las partes de la presa son comestibles. Además, las que sí lo son deben preparase de una manera específica para evitar problemas. Se trata de una carne muy propicia para la ingesta de proteínas en las dietas destinadas a la pérdida de peso corporal y quema de grasa por ser una carne muy magra con poca proporción de grasa en comparación con otros derivados.
La perdiz, en cambio, tiene un tratamiento completamente distinto al del venado. En su caso, se deben separar los muslos y las pechugas y preparar cada parte por separado de forma diferente. Los muslos han de dorarse bien con aceite de oliva y las pechugas se doran por la parte de la piel para que queden jugosa. Su sabor es más fuerte y más sofisticado que el de otras aves como el pollo de corral y puede acompañarse de varias guarniciones como patatas o verduras salteadas.
El venado
Del venado conviene comprar el lomo, envolverlo en forma de rulo y pasarlo por la plancha o la sartén hasta que quede dorado a fuego fuerte. Es muy recomendable consumir este plato poco hecho, pues al tener poca grasa se corre el riesgo de que quede demasiado seco si pasa mucho tiempo en la sartén.
Finalmente, puede acompañarse la carne con un puré de patatas, batata o con castañas calentadas de antemano en papel de aluminio. Todas ellas son recetas de cierta dificultad, por lo que aconsejamos acudir a un restaurante si no contamos con las habilidades necesarias para llevarlas a cabo.