Llevar el manejo de un grupo humano dentro de una empresa no es fácil y dependiendo del tipo de líder que seas tendrás o no éxito
Dependiendo del entorno laboral del que se trate existen diferentes formas de líderes en función de las circunstancias que lo rodeen, cada uno con los aspectos positivos y negativos que los engloban. Esto debe ser lo correcto dado que no todas las situaciones requieren la misma forma de liderar y por consiguiente el mismo líder. Mejor que tener patrones preconcebido lo necesario es saber jugar con las piezas para tomar las mejores decisiones en cada instante.
En el mundo laboral no siempre está la receta mágica con la que acertar en cuanto al liderazgo se refiere, ya que no todas las empresas actúan de las mismas formas y los individuos no son iguales.
El liderazgo tipo delegativo intenta que el grupo tenga la menor intervención del jefe. Que sea el propio equipo quien tome las decisiones y tenga una autonomía propia en determinadas cuestiones importantes. También se le conoce con el nombre de Laissez–faire, y tiende a tener el menor control posible sobre el grupo. Se entiende que los miembros del mismo tienen una alta capacitación y por tanto no requieren de tanta supervisión.
Existe otro tipo que es el líder autocrático. Se trata de un estilo más autoritario donde son los líderes quienes toman el control de las vías a seguir sin que el grupo tenga la posibilidad de elegir lo más mínimo. Los miembros del grupo solo acatan las órdenes de la cúpula superior.
En contra posición, el liderazgo en democracia. Aquí todo el equipo, tanto líder como miembros, toman las decisiones en conjunto y deciden el camino a seguir. Bien es cierto que la decisión última corresponde al líder pero este establece un debate para que todo el mundo tome parte de él.
Hay una forma de liderazgo que se basa en el premio a los miembros del equipo, algo de lo que también se beneficia el líder. Este se denomina transaccional. Aquí los componentes del grupo reciben premios por sus logros individuales (motiva a los empleados) de los cuales también el líder se beneficia.
Por último, la dirección de un grupo basado en el liderazgo transformacional se basa en altas dosis de comunicación para alcanzar las metas. Tiene una visión abierta y la transmiten al equipo. Aquí el líder es una persona que trasmite confianza y hace que la empresa sea flexible y el grupo también.
Cada empresa, con su visión y misión, puede llevar un tipo de liderazgo por parte de sus rectores que mejor se ajusten a sus circunstancias. En la capacidad de saber elegir estará el éxito que se puede tener a la hora de dirigir un equipo.
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