Debemos saber elegir los alimentos que compramos para evitar que puedan provocarnos problemas en nuestra salud
El poco tiempo que tenemos durante la semana hace que siempre estemos pensando en que la elaboración de nuestro almuerzo o cena nos dure el menor tiempo posible. En la cesta de la compra van productos destinados a esta función, para que podamos dedicar más tiempo a otros menesteres, a los hijos o incluso a adelantar en el trabajo.
Tanto pensamos en el tiempo que dejamos a un lado cuestiones importantes como si los productos que consumimos son todo lo recomendable para nuestro organismo, y especialmente no pensamos en el corazón. Da igual que tengamos en este momento un buen estado en cuanto a nuestro corazón se refiere, debemos saber prevenir enfermedades y problemas cardiovasculares. Aunque no vamos a recordar en profundidad determinados hábitos que deben desaparecer, sí nos vemos obligados a mencionarlos de forma breve. Y es que el alcohol y el tabaco deben ser desterrado por completo de nuestra rutina y vicios.
Pero también tenemos que prestar atención a la dieta. Una dieta mediterránea es el ejemplo perfecto para gozar de una buena salud cardiovascular, y con ella se evitarán alimentos como los que provienen del hígado. Dicho así muchos pensarán que están a salvo porque no lo consumen, pero si pensamos en el foie, la cosa cambia. El foie parte del hígado y no es aceptable para la salud del corazón.
Hay alimentos que son enemigos del corazón
Tampoco lo son las salchichas y el choped. Todas las carnes procesadas tienen un alto riesgo de generar cáncer de colorrectal, y sin ninguna duda estas dos variantes que mencionamos son las más peligrosas para el corazón.
No debemos recurrir igualmente a la margarina. Esta era la versión buena de la mantequilla cuando se descubrió que no era buena para el organismo, pero esta tampoco es tan amigable como pensábamos.
Ya sabemos que la carne roja es uno de los platos más demandados cuando acudimos a comer fuera de casa, y no pasa nada si lo hacemos de forma esporádica, pero recurrir a ella de manera periódica trae ciertos riesgos para la salud. Es lo mismo que ocurre con el bacon, que tiene un máximo protagonismo dentro de la comida rápida. El bacon reúne todas las propiedades para atentar contra el corazón.
Y por último te vamos a tocar también la merienda y el desayuno. Evita la tentación de los dónuts de forma asidua. Detrás de toda esa dulzura se encuentran un gran enemigo para nuestro corazón por sus azúcares y grasas trans y saturadas.
