Existen muchas dudas sobre si es bueno y beneficioso hacer deporte todos los días y qué consecuencias puede tener en el cuerpo
A todos los niveles, practicar deporte es uno de los hábitos más saludables que podemos realizar y el mayor favor que le podemos ofrecer a nuestro organismo y nuestro cuerpo, además también a nuestra mente. Se trata de invertir en la longevidad de nuestra vida además de fomentar relaciones sociales que se pueden establecer dependiendo del tipo de deportes que practiques.
El cuerpo humano está totalmente diseñado para estar en constante acción y tiene que tener un movimiento necesario, casi reclamado por él mismo. La practica deportiva realizada de manera continua tiene más de un beneficio y es el principal enemigo del sedentarismo tan pronunciado en la sociedad por los tipos de trabajo que desempeñamos. Eso sí, pasarse nunca es conveniente pero la actividad deportiva tiene más cosas beneficiosas que perjudiciales.
El deporte también necesita de que profesionales en la materia nos muestren e indiquen cómo debemos entrenar y los errores que se comenten en cada uno de los entrenamientos. Tener un hábito deportivo bajará la frecuencia cardíaca, tendremos un aumento de nuestra fuerza, contribuyendo a una mejor resistencia. Además se bajará la fatiga muscular y se desarrollan otros factores importantes como por ejemplo la coordinación y el equilibrio.
Aun viendo todas las ventajas que tiene el deporte, son muchos los expertos que indican que realizar ejercicio todos los días no es conveniente. Hay personas que se crean una adicción cuando el deporte tiene que ser una vía de escape y un disfrute. Estas personas, el día que no pueden realizar su práctica deportiva, sufren una angustia intensa que puede incluso derivar en ansiedad por no poder ejercer su rutina diaria. Además, el cuerpo necesita descanso, más si cabe cuando vamos realizando rutinas que tienen una alta intensidad, fruto del buen trabajo que se va realizando día tras día.
A estos niveles, surgen lesiones que tienes que saber prevenir escuchando tu cuerpo y asumiendo que este necesita un respiro que hay que darle. Y es que tenemos que tener claro que los extremos nunca son buenos, y en el deporte pasa igual. En este sentido, tampoco se puede pasar de no realizar nada de deporte a tener una alta intensidad.
El deporte es una maravillosa práctica que se debe hacer de una manera continua pero ejerciendo jornadas de descanso en mayor o menor medida. A nuestro cuerpo no podemos exigirle un funcionamiento a tiempo completo, tenemos que saber respetar sus fases de descanso por lo que tenemos que saber parar cuando sea él mismo el que nos indique que está sin energías.
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