Existe un motivo muy concreto por el que la mayoría de personas son incapaces de perder la grasa de la barriga. Te lo revelamos
Llegados al ecuador de marzo, es muy posible que muchos de nosotros nos hayamos propuesto este año mejorar nuestra condición física apuntándonos al gimnasio más cercano a nuestra casa y empezando a hacer unos ejercicios que hace unos años estábamos lejos de intentar. De momento, los tres meses de 2024 han transcurrido con relativa normalidad, nos sentimos algo más ligeros en el gimnasio y nuestro plan parece relativamente solvente.
Se basa en dejar de lado la bollería industrial junto con el resto de alimentos ultraprocesados, tales como la bollería industrial, el tazón de cereales del desayuno, el croissant que nos pedimos en el bar o la palmera de chocolate con extra de crema que degustamos cuando llega el fin de semana y que nos otorgamos como capricho indulgente simplemente porque creemos merecerla después de una semana agotadora aguantando a gente que no vale un solo segundo de nuestro tiempo.
En el gimnasio, la rutina es aquella que nos ha comunicado el monitor, una tabla más o menos genérica que debemos dominar antes de pasar a una rutina más específica y que consiste en entrenar dos grupos musculares cada día, con un primer día centrado en pecho y hombros con algún ejercicio de brazo, un segundo orientado al fortalecimiento de la espalda y el bíceps, con algo de tríceps, un tercero dedicado al tren inferior con todo lo que ello conlleva: gemelos, isquiotibiales, cuádriceps, glúteo y abductores. Finalmente, en el último día entrenaremos aquellos grupos que hayan quedado pendientes como los abdominales, los antebrazos y algunos ejercicios variados que pueden acoplarse a cualquiera de los otros tres días. Y, sin embargo, la barriga sigue ahí. Este es el motivo.
El motivo
El motivo de la permanencia de la barriga y de la grasa abdominal reside en una falta de planificación y seguimiento tanto de la rutina de gimnasio como de la alimentación. Simplemente llevando un registro de nuestras comidas y de nuestros entrenamientos seremos capaces de progresar mucho más de lo que pensamos.
Para ello basta con recurrir a una nota del teléfono móvil y bosquejar en ella los días que vamos al gimnasio y los ejercicios que hacemos, concretando en cada uno el peso que somos capaces de manejar, así como el número de series y repeticiones en cada caso.